Mi primera vez…. En avión

Hola a todos.  

Sean ustedes bienvenidos hoy a escuchar una anécdota y conocerme un poco más

En Noviembre de 2016 tuve mi primer viaje en avión de manera inesperada.

Todo comenzó cuando mis jefas (trabajo en un laboratorio bioquímico) decidieron que les parecía una buena idea mandarme a un congreso de Control de Calidad en la provincia de Buenos Aires. Como algunos sabrán yo vivo en San Juan, es decir a 1200km de la Capital Federal y un viaje en colectivo demora alrededor de 15-16 Hs pero es lo que siempre hemos tenido que hacer para viajar porque el avión es muy caro……. ¿O no?

Para mi viajar en avión ha sido siempre considerado como un gran lujo y algo que haces cuando viajas a un país con una distancia importante, así que se imaginaran mi cara cuando mi jefa me dijo “Y te vas en avión, así no te demoras tanto” *Inserte aquí emoticon abriendo la boca*

LA emoción que tenía, no me cabía en el cuerpo, encima que no solo iba a viajar en avión si no que a una ciudad a la que nunca había ido, y además sola. Cosa que… ME ENCANTA! Porque aquí sale mi lado antisocial y para viajar, no hay nada como la libertad de ir solo.

Previo al viaje me puse  a leer tooooooooodas las páginas de las aerolíneas para ver que podía llevar y que no, y preparé mi bolsita ziploc con los únicos líquidos permitidos (un perfume y un alcohol en gel de menos de 100cc) todo tal cual las normas. Toda esa preparación para después enterarme que eso solo era necesario para viajes internacionales jajaja. Errores de primeriza. 

Segundo error: Pensar que no me iba a hacer falta tomar algo para las nauseas. Yo suelo marearme mucho cuando viajo en colectivo (o en barco, o en bote, o en montañas rusas, o en columpios, vamos, en todo) pero como el viaje era corto, de solo dos horas, pensé que iba a estar bien. Error. No vomité, pero me pasé gran parte del viaje con los ojos cerrados y escuchando música para distraerme. Seguramente cualquiera que me vio pensaba que estaba muerta de miedo, pero eso fue lo de menos.

En ningún momento tuve miedo, el viaje fue tranquilo y no tuvimos turbulencia. Además pasó rapidísimo, porque en total era 1 hora y media pero la realidad es que, entre que el avión despega y te muestran todas las normas de seguridad, miras un poco por la ventanita como se hace todo pequeñito, escuchas un par de canciones. Después ves que vienen sirviendote algo para comer, entonces esperas que lleguen a tu asiento con el carrito y te den la comida y algo para tomar. Comes. Después esperas que vuelvan a pasar para llevarse los residuos. Escuchas otro par de canciones, lees la revista del avión que solo te muestra destinos a los que solo podes soñar con viajar, encima es re gorda y pensas que tiene mucho contenido para después descubrir que es gorda porque cada nota tiene la mitad en español y la mitad en inglés ademas de mil propagandas. Y cuando menos lo esperas te dicen que van a iniciar el descenso y vos "O.O ¿Tan rápido?"

Entonces ves como cada vez estas más cerca del suelo y que pasas encima de los autos tan cerquita que parece mentira para despues llegar a Aeroparque que es todo modernidad y me encanta. 

Todo en ese viaje fue espectacular, el viaje en avión, la ciudad de la furia que me tiene fascinada y me pasé toda esa semana cantando "Puerto Madero" de Kevin Johansen que me hace reír cada vez que la escucho o  que veo el vídeo así que lo tienen que ver ustedes también.

"All the people that aren't from here would like to come and stay

And all the people that are from here just want to get away"

La habitación del hotel era re linda aunque no tenía ni un solo enchufe que coincidiera con mi cargador así que me compré un cargador trucho, tan trucho que solo me duró dos días y se quemó así que el resto del viaje me la tuve que pasar cargándolo en un pasillo del hotel, o con los chicos de recepción, en los baños del shopping y usando lo menos posible la batería.

Fue un viaje increíble, incluso a pesar de enterarme al otro día de llegar que se había caído el avión donde viajaban los jugadores de Chapecoense, y podría haber significado un ataque de pánico inmediato pero no, estoy convencida que cuando te tiene que tocar te tocará en la calle o en tu casa.

Ahora, ¿Recuerdan lo que dije al principio de esta entrada? ¿Que estaba convencida que un viaje en avión era caro y solo para ocasiones especiales? Bueno, gracias a este viaje empecé a averiguar bien y para mi sorpresa me enteré que si el pasaje lo sacas con anticipación (más de un mes si es posible) y en estos casos donde las distancias son grandes sale igual o menos que el colectivo. Así que este año volví a viajar dos veces, primero a la Feria del Libro que me salió casi igual que el colectivo, ahorrándome muchas horas de viaje y luego a Bahía Blanca donde gracias a la conexión de los vuelos y un pequeño descuento por la inscripción al congreso me ahorré casi $1500 en comparación si hubiera viajado en colectivo. ¿Que tal? Si me lo hubieran contado, no lo creía.

Así que esta ha sido mi pequeña experiencia viajando en avión. Seguramente para el que ya lo ha hecho es algo natural pero seguramente hay otros como yo que lo ven como algo alucinante.

¡Hasta la próxima!